Es más fácil meditar sobre la Realidad a través de un símbolo, que directamente.
Los símbolos Espirituales se dan a estudiantes altamente intelectuales, profesionales o de mente activa como un medio para (1) apaciguar la inquietud mental; y (2) trabajar constructivamente los cuerpos interiores, ya que estas formas están en correspondencia con la construcción real de: (a) un átomo, y (b) el universo.
Concéntrese en cada símbolo durante siete minutos: (1) Piense en una cruz dentro de un color azul claro, como una referencia a la crucifixión de la naturaleza física o corporal. La concentración regular puede conducir a cambios psicológicos. (2) Visualice un triángulo de color dorado como una representación del equilibrio y la armonía intelectual. (3) Visualice una estrella plateada de cinco puntas como símbolo del ser humano perfecto.
Una flor es un objeto de concentración tan bueno como cualquier otro. De hecho, es mejor, porque el practicante también puede intentar unificar su propio corazón con el corazón de la flor.